Alejandro Gonzalez | 17:48
'Sin persecución y sin mentiras', no hay prosperidad
Mateo 6:33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Cuando los lideres cristianos hablan sobre prosperidad se levanta polvareda dentro de las paredes de la iglesia, pues así como están aquellos que defienden una vida en humildad y pobreza están también los que pregonan que las riquezas son un derecho del cristiano. Para las dos corrientes les informó que aunque están en lo cierto en parte las dos también están equivocadas porque dejan de lado parte de la verdad.
Esto es debido a que la prosperidad es una consecuencia de la entrada al reino de Dios es decir el Señor en su 'propia justicia' es quien recompensa a aquel que se convierte en ciudadano de su reino en cumplimiento de su promesa.
Asimismo el pasar a ser parte de una institución implica aceptar tanto los derechos como las obligaciones que la rigen en fin empezar a pensar como ellos, 'estar en un mismo espíritu': Tener MENTALIDAD DE REINO.
Asimismo el pasar a ser parte de una institución implica aceptar tanto los derechos como las obligaciones que la rigen en fin empezar a pensar como ellos, 'estar en un mismo espíritu': Tener MENTALIDAD DE REINO.
Marcos 10:29-30 Respondió Jesús y dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por causa de mí y del evangelio, que no reciba cien veces más ahora en este tiempo; casas, hermanos, hermanas, madres, hijos, y tierras, con persecuciones; y en el siglo venidero la vida eterna.
Ser cristiano/a no es para nada fácil, es la decisión mas transcendental que un ser humano puede tomar pues aunque en lo natural -en la apariencia física- nos muestre que no dejamos a nuestros seres queridos o cosas materiales de lado, el mundo espiritual no tardara en enseñarnos que estamos equivocados. La resistencia que pronto opondrán las personas que nos rodean a nuestro cambio de reino sera en muchos casos acerrima al punto de no recibir mas una palabra de algunos de ellos o solo constantes enojos de su parte. Pues es desde el preciso momento en que tomamos 'la decisión de seguir a Cristo' que dejamos todo.
No obstante este alejamiento a veces a propósito como consecuencia por un cambio de vida y otras veces como resultado de la 'persecución' iniciada por las fuerzas del mal contra el nuevo creyente. Es decir el hostigamiento, agresión, discriminación o descalificación que el cristiano sufre por otras personas, grupos o instituciones que ejercen poder con el propósito de desmovilizar o eliminar a grupos y personas específicos.
Mateo 5:10-11 Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
Como vimos en el estudio anterior sobre las bienaventuranzas esta palabra significa 'ir hacia adelante' por lo que parafraseando estas dos bienaventuranzas, bien lo que Cristo podría decirnos por ellas es: "...Sigan adelante los que son perseguidos... Sigan adelante los que sean insultados e injuriados con toda clase de mentiras por mi causa...".
Aunque en esta parte no me centrare en las bienaventuranzas sino en una sola palabra, una acción propia del infierno pues aunque ya hemos visto que es la persecución y que es justamente ella la que nos marca nuestra entrada al Reino de Dios y la búsqueda de su justicia en esta frase de aliento Cristo agrega que no solo seremos pasibles de persecución sino de 'habladurías infladas de mentiras': El chisme, la mentira. ¿Cuantas son las veces que con el sacrificio de su trabajo y la bendición del Señor se ha comprado algo? Y al tiempo se ha enterado de las habladurías que lo acusaban de que su prosperidad se debía a... (algo malo).
Por ultimo y aunque en otras enseñanzas nos adentraremos mas en como aceptar y recibir la prosperidad de Dios para nosotros en esta ocasión hemos podido develar tres cosas que siempre la acompañan:
- En fin la prosperidad es una consecuencia de la justicia de Dios, y de la aceptación de los deberes, derechos y obligaciones de pertenecer al reino de Dios. Es decir de empezar a tener Mentalidad de Reino.
- La prosperidad es ademas una consecuencia de nuestra decisión de dejar el mundo, a todo aquello que nos apega a lo terrenal sean estos 'afectos o cosas materiales'. Confirmándose esta de determinación en la persecución iniciada contra el creyente.
- La prosperidad es un regalo de Dios a todos aquellos que buscan su justicia, por lo que para 'el mundo' es inentendible porque es sobrenatural. Ante esto el mundo solo puede responder con 'habladurías infladas de maldad' (mentiras).
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