Alejandro Gonzalez | 13:51
¿Esta bien; "Echar Suertes"?
Es común pensar que esto esta mal al confundir el "echar suertes" con el jugar a los juegos de azar y es justamente esta confusión la que permite en nuestra vida la entrada al pecado de la idolatría que no es otra cosa que anteponer a nuestro único y verdadero Dios un ídolo, cosa u actitud permitiendo de esta manera que seamos enceguecidos espiritualmente y por lo tanto nos movamos erraticamente pensando la mayoría de las veces que lo que hacemos es lo correcto.
La suerte no es azar
Por tanto puedo asegurarle que si este es su caso, en verdad si esta echando su suerte aunque por tierra, pues lo esta haciendo de una manera equivocada ya que Dios si le dará de acuerdo a como usted le ha dado potestad a él sobre su vida y no tendrá excusa para decir: "...¿Por qué me ha sobrevenido esto?" ya que de seguro en aquel día él te contestara "Por la enormidad de tu maldad..." (Jer 13:22) "Esta es tu suerte, la porción que yo he medido para ti, dice Jehová, porque te olvidaste de mí y confiaste en la mentira...." (Jer. 13:25)
No obstante esta explicación aun la pregunta sigue abierta, porque hasta aquí solo vimos que el azar no es suerte sino idolatría aunque si pudimos aclarar que la suerte proviene de Dios y es comparado por la palabra con un dictamen. ¿Pues entonces porque se dice 'echar suertes' y cuales son las situaciones en que nos esta permitido a los creyentes?
Poniendo fin a una pelea
La suerte pone fin a los pleitos,Y decide entre los poderosos. (Proverbios 18:18)
Tanto si leemos los versículos anteriores a este como los posteriores encontraremos características de como son los pleitos u enojos y de cuanto poder tienen para las personas que participan de la contienda los cuales antes podrían ser considerados hermanos y en la actualidad no se pueden ni ver. A veces esto puede haber sucedido por alguna cosa u ofensa que ya ni se recuerda, otras por posesiones o riquezas. No obstante -como ministros u obreros de Dios debemos tener en cuenta que- lo que esta en juego en realidad no son esas cosas sino la vida eterna de los que participan en el pleito pues donde no hay perdón no puede reinar el amor de Dios y por ende nuestra fe no puede ser agradable a Dios y no podemos ser parte del Reino de Dios. Pero ha no alarmarse ya que existe una solución para recuperar nuestra posición anterior a antes de comenzado el pleito. Aceptar lo que Dios dispone, entrando en acción 'el poder del acuerdo' pues de seguro ninguna de las partes que integran el conflicto saldrá perjudicada ( a no ser que al igual que Lot su corazón este movido por egoísmos).
(Hechos 1:26) Y les echaron suertes, y la suerte cayó sobre Matías; y fue contado con los once apóstoles.Cuando decimos ministerio debemos tener en cuenta que no se trata de un trabajo pues lo que nos mueve en uno y otro caso son pasiones diferentes como vimos en un articulo anterior aunque eso no quiere decir que nuestro forma o manera de ganarnos la vida no sea un ministerio pero vayamos al caso que nos motiva.
Si leemos el capitulo uno del libro de los Hechos de los apóstoles podremos determinar que Matias debió cumplir ciertos requisitos para poder convertirse en el décimo segundo apóstol.
Es necesario, pues, que de estos hombres que han estado juntos con nosotros todo el tiempo que el Señor Jesús entraba y salía entre nosotros, comenzando desde el bautismo de Juan hasta el día en que de entre nosotros fue recibido arriba, uno sea hecho testigo con nosotros, de su resurrección. (Hechos 1:21-22)
Los requisitos que he podido identificar fueron cinco:
- haber estado junto a los apóstoles
- desde el bautismo de Juan
- hasta el día de la ascencion de Cristo
- que haya sido testigo del ascenso
- y de la resurrección de Jesucristo
Es decir que Matias ademas de ser piadoso debió aceptar sin chistar a quienes lo precedieron con paciencia, a lo mejor con la esperanza de algún día poder tener una autoridad mayor pero nunca reclamándola -como muchas veces pasa dentro de las congregaciones, por lo menos en la mía si, no se si en la suya también-. En fin Matias tuvo que cumplir los mismos requisitos que los apóstoles, haber transcurrido los mismos tiempo y transitado por los mismos lugares teniendo que ser hallado como un fiel testigo de Jesucristo.
Así mismo llegado el momento en que podía hacerse realidad su esperanza había alguien mas que podía dirimir el puesto con él pero uno solo que podía confirmarle su lugar.: DIOS. Y eso fue a través de la simpleza de una moneda* al aire.
* Pesa.
Sin comentarios